– Reducir nuestra huella de carbono en un 40% de aquí a 2030 (en los alcances 1 y 2, a una cuota de mercado constante con respeto a 2018) reduciendo nuestro consumo directo e indirecto de energías fósiles (diésel de las máquinas, gasolina de los vehículos, electricidad).
– Reducir nuestro consumo de cemento (alcance 3), diseñando proyectos usando menos concreto y usando cementos con una huella de carbono reducida (CEM II o CEM III) y ligantes alternativos.